domingo, 17 de febrero de 2013

Fred Bougouin o la nueva sonoridad del viejo arpa celta


El área de Cultura del Ayuntamiento de Colunga se ha apuntado un tanto muy importante con el concierto de arpas celtas y electroacústicas, que, a cargo de Fred Bougouin, hemos podido disfrutar en dicha localidad este sábado.

La pasada semana había elaborado una entrada en uno de los blogs en los que participo acerca de lo que presumía que iba a suponer el concierto y he de decir que no me había equivocado.


Bougouin, a quien creo recordar en un concierto en Oviedo a principios de la pasada década, formando parte del grupo "Keltiac", nos hizo degustar a escasa distancia los sonidos de estas arpas de tan exquisita sonoridad. En concreto, para este concierto, el francés contó con un arpa de cuerdas metálicas y otra eléctroacústica con cuerdas de nylon, y con la inclusión de tecnología para efectos que añadieron matices sonoros y aportaron puntos de vista alejados de la técnica pura del arpa celta galesa. Y es que, de hecho, el menor protagonismo se lo llevaron obras del folk celta (apenas un par del reconocido como último bardo en el siglo XVIII, el arpista y cantante ciego irlandés, Turlough O'Carolan) y alguna otra pieza en la que participó el también arpista asturiano Daniel García de la Cuesta, así como una versión de Felpeyu.

La utilización de secuenciador para efectos de looping (grabación de pistas en bucle, que suenan enlazadas en secuencia por sí mismas mientras el intérprete continúa tocando) aportaron novedosas sensaciones a tan tradicional instrumento, al que Bougouin sabe exprimir todas sus posibilidades, incluidas las percusivas (utilizando la tabla y la caja del arpa como caja de ritmos). De esta forma el francés nos condujo a un viaje alrededor del mundo, intercalando entre creaciones suyas evocadoras del desierto del líbano, del Asia oriental, de Italia,... otras piezas y versiones de ámbitos tan dispares como la que nos llevaba a Cuba con una versión del "Chan Chan" de Compay Segundo, a Asturias con una versión de "Los Fayeos de Mayo" de Felpeyu o a Inglaterra con una versión de "Walking on the Moon" de The Police, en lo que supuso toda una demostración de lo que puede dar de sí el instrumento unido a las nuevas tecnologías.

A Bougouin hay que agradecerle tanto su forma didáctica de llevar el concierto, como su esfuerzo con el castellano (y hasta con el asturiano). Durante casi dos horas hemos participado de un viaje musical alrededor del mundo, gracias a las arpas y las manos de este francés que ha pasado a formar parte de mi altar musical de arpa electroacústica, junto al suizo Andreas Vollenweider.

Sería muy deseable, e higiénicamente cultural, una mayor difusión de estas músicas y técnicas, a las que los gestores públicos y privados deberían estar mucho más atentos.




lunes, 11 de febrero de 2013

Añada "Texendo suaños"



Sobrecogedora sensibilidad. Sazonada con cierto toque Cunningham. Origenes imprecisos. Varias razones por las que esta añada, "Texendo suaños" la traigo aquí y ahora.



Corría el año 1999, y tras una década de éxitos y galardones dentro de la música tradicional asturiana y folk internacional (no en vano los dos hermanos recibieron los prestigiosos premios McCallan de gaita), los hermanos Tejedor, José Manuel, Javier y Eva, se lanzaron hacia su primer obra discográfica, "Texedores de Suaños", haciendo juego de palabras con su apellido. 

Ese disco es "redondo", redondo, en toda la acepción de su palabra. Fué editado por la madrileña "Resistencia" y producido por el excepcional Phil Cunningham, uno de los máximos exponentes del folk céltico. En ese debut participaron gente como Kepa Junquera, Michael McGoldrick, Chus Pedro, James McKintosh (Shooglenifty), Duncan Chisholm (Wolfstone) o Ígor Medio. 

Entre sus piezas, se recoge la nana, añada, canción de cuna -que protagoniza esta entrada- que a primera vista parece tener origen céltico. Y digo parece porque es a lo inducen los sonidos. Si no recuerdo mal, en su día creo recordar que se refirieron a este tema como una nana tradicional de Arenas de Cabrales. Sin embargo, a modo de curiosidad, habría que decir que, a falta de confirmación por los hermanos Tejedor (con los que he intentado comunicarme, pero cuyo buzón de correo electrónico ha devuelto sistemáticamente mis intentos) he husmeado -sin gran profundidad, todo he de decirlo- al respecto de este tema y me he llevado varias sorpresas. Quizá haya quien nos pueda aportar más luz al tema, lo cual se agradecería.

En primer lugar, la letra de esta añada "Texendo suaños" aparece cantada en castellano y no en asturiano, como su título hiciera presumir inicialmente. Probablemente el toque Cunningham se deja notar en los aires célticos que predominan en la segunda parte del tema, ya totalmente instrumental.

Sin embargo en lo musical me ha resultado curioso encontrar a gente que relaciona la pieza con Galicia, quizá por el título, quizá por el aire céltico, quizá porque realmente la cercanía geográfica haya hecho compartir algunos sones similares o quizá porque el inicio del propio Himno gallego recuerda las notas de esa nana, como se puede apreciar aquí y aquí.

Pero sobre todo me ha sorprendido encontrarme con una marcha procesional sevillana, la Marcha Caridad Guadalquivir, cuya melodía es prácticamente idéntica, como se puede comprobar aquí.


Por lo que he averiguado, Paco Lola, excomponente del grupo Albahaca, dice haber compuesto hace bastantes años esta marcha procesional. Por el Sur indican que para componerla se inspiró en una obra de su antiguo grupo musical, "Y el Guadalquivir". No obstante, la añada asturiana es mucho más antigua que la marcha procesional.

En cuanto a la letra, en primer lugar me ha llamado la atención lo ya mencionado, que está cantada en castellano:

-Señora Santa Ana
por qué llora el niño
-Por una manzana
que se le ha pedido
-Las cuatro esquinitas
que tiene su lecho
son cuatro angelitos
que velan sus sueños.
-Ea ea ea, Ea ea ya, Ea ea ea, Ea ea ya


En segundo lugar, el tema redundante de Santa Ana y el niño que llora porque ha perdido una manzana. Santa Ana era, según indican las fuentes bíblicas, la madre de la Virgen María. Existen bastantes representaciones artísticas en las que aparecen estos personajes. En algunas de ellas, aparecen cestos de frutas:


Resulta bastante probable que el orígen de esta nana/letra se encuentre en algún romance devoto, en villancicos de época medieval, recogidos por el cancionero popular español. De hecho por zonas de Burgos o Soria están recogidos versos como estos:

Señor San Joaquín, 
señora Santa Ana
¿por qué llora el Niño?
- Por una manzana
que se le ha perdido.
- Venga usté a mi casa,
yo le daré dos:
una para este niño
y otra para el de Dios.

Y la letra se ve que se fué extendiendo, por los mares. El himno de la patrona de Las Palmas, reza en su estribillo:

Señora Santa Ana,
¿por qué ríe el Niño?
Por una manzana que tú le has traído:
más no la de Eva, que es de perdición,
sino la manzana de la Redención.

También en Canarias se recogen versiones de canciones populares con Santa Ana como protagonista:

Señora Santa Ana ¿por qué llora el niño?
Por un manzana que se le ha perdido.
Yo le daré una, yo le daré dos,
una para el niño y otra para vos.
Yo no quiero una, ni tampoco dos,
yo quiero la mía que se me perdió.
Duérmete mi niño, duérmete mi amor,
duérmete pedazo de mi corazón.

En América se recogen letras similares:
Señora Santa Ana, 
¿por qué llora (nombre del niño/a)
Por una manzana 
que se le ha perdido.
Vamos a la huerta 
y cortamos dos.
Una para (nombre del niño/a) 
y otra para Dios.
ó 

Señora santa ana 
por qué llora el niño.
Por una manzana que se le ha perdido.
Manzanita de oro si yo te encontrara
se la diera al niño para que callara. 
En la madrugada nació el niño dios 
como al medio día vio la luz del sol.

Concretamente en Argentina hablan de esta letra:

—Señora Santa Ana,
¿qué dicen de vos?
—Que soy soberana
abuela de Dios.

—Señora Santa Ana,
¿por qué llora el niño?
—Por una manzana
que se le ha perdido
debajo la cama.

—Vamos a mi quinta,
yo te daré dos:
una para el Niño
y otra para vos,

Señor San José,
alférez mayor,
bate la bandera,
que pase el Señor.

—Señora Santa Ana,
toque la campana.
¿Por qué llora el Niño?
—Por una manzana
que se le ha caído
debajo la cama.

—Vamos a mi cuarto.
Yo le daré dos:
una para el Niño
y otra para vos.

Y en México hablan de un arrullo tradicional, con letra similar:



Y podríamos seguir, pero seguro que algún musicólogo/filólogo/antropólogo ilustraría este tema mucho más y mejor. Mientras tanto, me sigo quedando con "Texendo suaños"...

Esa mirada triste de Daniel Moyano


Daniel Moyano (1990) (foto de José Luis Nieto) 

Dejar un diario de a bordo como los indios de mi provincia, ya desaparecidos, dejaron petroglifos. Dejar sobrevivencias, para eso sirven las palabras.
(De Libro de navíos y borrascas).


La foto que encabeza esta entrada fué realizada en 1990 por mi amigo fotógrafo José Luis Nieto, en blanco y negro, al que agradezco que en su día me regalara una copia de la misma, y que en su día escogí para formar parte del libro "Teatro Campoamor: un siglo de Cultura" (1992). La tengo considerada, entre todas las que he podido ver a lo largo del tiempo, como "la foto" de Daniel, la que puede resumir toda una vida, la que recoge en un momento mágico toda la esencia de Moyano en su mirada, esa mirada triste a la que tanto aludo.



Volver (Alfredo Le Pera y Carlos Gardel)
Suele decirse que nadie muere del todo mientras haya alguien que le recuerde. Han pasado ya más de veinte años desde el fallecimiento de Daniel Moyano  (Buenos Aires 1930 - Madrid 1992), uno de los grandes literatos hispanoamericanos del siglo XX, el mejor "de los menos conocidos", a quien tuve el gusto de conocer y el honor de tratar. 

Fontanero y albañil de oficio, alma de músico y genio de escritor, hace unas fechas subía a este blog una entrada a modo de relato-cuento dedicado a su figura. Para quienes le conocieron y disfrutan trayéndole a su memoria, y para quienes no lo hicieron, pero sienten curiosidad por conocer quién ha sido/es (quien deja obra, y se mantiene en la mente de alguien, perdura siempre) este escritor,  sirva esta entrada para dar a conocer mejor a la persona y su obra, y, a modo de pistas para quienes quieran introducirse en la lectura de alguna de sus publicaciones. Por el medio se encuentran salpicados enlaces a algunos de sus relatos, que recomiendo leer.

Moyano es, sin ninguna duda, el mejor escritor hispanoamericano del grupo de los "menos conocidos", en el que injustamente se ha visto integrado por la sistemática indiferencia que la crítica de este país le ha regalado tanto en vida como tras su desaparición. 

Y de todos ellos (los más y los menos conocidos), sin ningún género de dudas, era el mejor contador de historias (me refiero a contarlas en persona, viva voz), tal y como han reconocido las voces más prestigiosas de las letras en español (Cortazar, Roa Bastos, Benedetti, etc.). Moyano podía narrar una y otra vez la misma historia sin que por ello perdieras la fascinación por la misma. Interpretaba y reinterpretaba cuentos que en algún sitio había escuchado aportándoles su particular visión y música. Curiosamente, quien busque sus referencias, no las encontrará entre los escritores argentinos, sino en los Kafka, Pavese, Rulfo, Rilke,... En realidad a Moyano no le gustaba fotocopiar la realidad, sino mostrarla tamizada a través de sus sentidos, enredándose en situaciones casi inverosímiles.



Su colega y amigo, Mario Benedetti, días después del fallecimiento de Moyano, glosaba así la figura de éste, coincidiendo enormemente con el resto de personas que le conocimos.






Moyano con García Márquez en 1968
Daniel Moyano con Julio Cortazar 

Moyano y Bioy-Casares



En la Argentina anterior al golpe de Videla de 1976, Moyano estaba siendo reconocido como uno de los tres mejores narradores argentinos vivos. Había sido premiado en 1957 por su "Artista de variedades", y su obra "El Oscuro" (premiada con el Primera Plana Suramericana en 1968), era una de las tres obras de la década. El mismo Julio Cortazar le consideraba el mejor contador de historias de su generación. Luego vino el exilio y con él, el olvido, y en España, la indiferencia. El propio Ernesto Sábato manifestó en diferentes ocasiones su extrañeza porque ninguna editorial española se interesara por la obra de Moyano, lo que por fin comenzó a animar a diferentes editores (en 1985 se editaba "Libro de navíos de borrasca"), lo que no a los críticos.


Pero como suele suceder, lo que aquí no te reconocen, lo hacen fuera, y así, en 1985, recibía en París el Premio Juan Rulfo por "El halcón verde y la flauta maravillosa", lo que supuso el definitivo espaldarazo anímico (y económico) para los que serían sus últimos años de vida. En 1990, el Ministerio de Educación Francés impuso como lectura obligatoria en sus colegios el "Libro de navíos y borrascas" y ese mismo año recibía en Buenos Aires el premio Boris Vian por "Tres golpes de timbal".

A Daniel le escuché antes de leerle, y le leí antes de tratarle. Me encontré por primera vez su sonrisa triste una ovetense tarde de mayo de 1988. En la ciudad se celebraran los encuentros literarios "Narrativa 80". Más adelante comprendí que, desde su llegada en 1976 como exiliado a España,  de las escasas alegrías que disfrutaría, la mayoría de ellas tenían relación con esta ciudad: sus viajes hasta aquí, los talleres creativos literarios, el reencuentro con algunos colegas suyos en las ediciones que sobre Literatura Hispanoamericana se realizaron por aquellos años... Sin duda fue en sus últimos años de vida y en Oviedo, donde Moyano re-encontró por momentos al Daniel que se había quedado extraviado en La Rioja.

Nuestro trato se hizo más intenso a partir de 1989. Daniel había sido requerido en aquellos días por la añorada Fundación Municipal de Cultura del Ayuntamiento de Oviedo para realizar un taller de creación literaria y apenas unos segundos bastaron para que me decidiera a inscribirme. Fueron aquellos unos años de mucha actividad cultural en la ciudad, a todos los niveles. Oviedo, "capital mundial" bastantes veces de muchas cosas, pero casi siempre disuelta como azucarillo por no saber aprovechar los caminos que primero tanto costaba abrir. Como en otros lugares, la desasosegante costumbre política de arrasar con todo lo precedente... En fin... En aquellos años se dió la paradoja de que tan poco se hizo por la ciudad como urbe, como tanto se hizo por la Cultura (ciclos de cine, de jazz, exposiciones, encuentros literarios, etc., etc.). Aquel fue dinero verdaderamente bien invertido en Cultura. Por el mismo precio o mucho más, en la actualidad se hacen cosas que ofrecen mucho menos.

En concreto, inolvidables fueron las ediciones de Encuentros Literarios, de las que especialmente recuerdo dos, recién comenzados los 90', sobre Literatura Hispanoamericana, y en los que gracias a la intermediación de Daniel, pude charlar personalmente con personajes tan admirados por mí como -de no darse las circunstancias- inalcanzables, tales como Adolfo Bioy Casares, Augusto Monterroso, su mujer Bárbara Jacobs, Mario Benedetti, Arturo Azuela, Julio Ramón Ribeyro, Juan José Saer, Jorge Edwards,... De los cuales, en este momento -y esperando no me falle la memoria-, salvo Jacobs y Edwards, la Ley de Vida, tantas veces injusta, pero siempre inexorable, ya nos los ha ido arrebatando.


Recuerdo a Daniel en el edificio de La Granja, en el Parque San Francisco, con su inolvidable flequillo revoltoso y su inseparable chaqueta de cuero marrón y su jersey gris de espigas. Desde el primer instante aquel me pareció un tipo singular ("Soy típico argentino, o sea una mezcla, en mi caso de abuelo italiano, madre brasileña y padre medio indio") y una de esas pocas personas que te llegan muy adentro desde el primer instante. En aquel momento ninguno podíamos imaginar que nuestra amistad tan sólo duraría algo menos de tres años, y aunque limitada a los talleres literarios, los Encuentros literarios, algunas largas parrafadas de cafetería y algunas llamadas telefónicas, lo suficientemente intensa como para que pasados veinte años, mantenga muy frescas aquellas conversaciones y las vuelque aquí ahora como si de exorcizar algún demonio se tratara.

En aquellas largas parrafadas hablábamos de casi todo lo divino y de lo humano, y -muy por encima- de alguna amargura que lloraba por dentro. El alcohol dicen que ahoga las penas, pero las de Daniel, por desgracia, sabían flotar y nadar. De aquellas cosas de las que hablábamos, de su vida y sus circunstancias, trata esta entrada, en la que explico algunas de las claves que aparecían en el relato-cuento anteriormente aludido "El albañil metido a cuentista".

El ruido de sables que Moyano decía haber escuchado en el vientre de su madre, era el término que solía emplear al referirse al golpe de Estado que, un mes antes de su nacimiento, derrocaba a Hipólito Yrigoyen. Como le dije desde el primer momento, le entendía perfectamente; a mí me pasó lo mismo, a otro nivel afortunadamente, con El pequeño tamborilero.
Finca de Los Espinillos. Falla y Che Guevara
Los mencionados y verídicos "asaltos" al jardín de Manuel de Falla con Che Guevara los recogió en Unos duraznos blancos y muy dulces.

Sus trabajos periodísticos, así como alguna de sus obras, como la premiada "El Oscuro" supusieron que fuera visto de forma incómoda por diversos sectores argentinos. De aquella época data "Cantanta para los hijos de Gracimiano", uno de los escritos de los que estaba más orgulloso Moyano, aunque uno de los relatos más tristes, desoladores y desgarradores que jamás se hayan escrito. En la emisora local, donde leían diariamente capítulos de sus obras, recibieron amenazas de bomba si continuaban con las lecturas. Al producirse el golpe de Estado, fue inmediatamente detenido sin argumentación alguna, y sus obras, junto a las de Cortazar y Neruda fueron sacadas de la Biblioteca y quemadas en el cuartel militar.

Argentina. Golpe de Estado. Videla. 1976.

El pajarito que cada día a la misma hora veía posarse sobre la misma teja a través de la rendija de su celda de castigo lo reflejó en "El Trino del Diablo".

Tras su puesta en libertad, y conociendo que iba a volver a ser encarcelado, puso rumbo a España, donde malvivió para dar alimento a su familia, pasando cinco largos años sin poder escribir ni una sola palabra.

La tía Lila fué el primer relato que escribió para salir de la sequía creativa que padecía desde su salida de Argentina, y lo hizo forzado por su amigo médico y pintor Osvaldo Gomáriz, quien le encerró con él en la buardilla de su casa hasta que escribiera algo coherente. En un momento de desesperación e impotencia, su amigo le "prestó" a su tía Lila, sobre la que Moyano se puso de inmediato a escribir, de forma que creó una historia de una sentada, en menos de tres cuartos de hora y sin correcciones, que ha pasado a ser uno de sus cuentos más celebrados y su reencuentro con la creación literaria.

El manuscrito al que aludí, enterrado y desaparecido, que tuvo que ser re-escrito ya en España es "El vuelo del tigre", que fué editado en 1981 aunque por rebeldía no quiso que la fecha figurara en la edición.

Su alma de músico (había sido profesor de violín en el Conservatorio de La Rioja y concertista de viola), le venía de familia, no en vano su abuelo tocaba el acordeón, su padre la mandolina y, ahora su hijo Ricardo toca la guitarra. Durante aquellos años en Oviedo nos recordaba de continuo que en el sonido de las campanas del Edificio de la Caja de Ahorros -cuando a las horas en punto sonaba el himno asturiano "Asturias Patria Querida"- faltaba una nota: "Fíjate bien -decía- ... Turias Patria Querida, falta la primera...". Esa musicalidad la trasladó al papel, y así siempre concedió una gran importancia a la sonoridad de sus palabras, que reconocía leer en voz alta para escucharlas previamente al visto bueno. Otra prueba de ello son los títulos de algunas de sus obras, como "El trino del diablo", "Tres golpes de timbal" o "Silencio de corchea".

Las cuartillas a las que yo me refería en mi relato, y que nunca continué, y hasta extravié, tienen relación con uno de sus talleres literarios, en el que yo me inscribí, no por la convicción, ni la intención ni la necesidad de escribir, sino en aquel tiempo, por simple gusto. Contenían unas poesías libres que escribí la noche en que comenzaba el ataque aliado para la liberación de Kuwait en enero de 1991. A la tarde siguiente debíamos leer cosas de nuestra propia cosecha y aquellas cuartillas sonaron en la sala en medio del silencio, y el gesto de su cara mutó en una emoción que en principio creí ficticia, un educado cumplido. Con el tiempo y su posterior insistencia y persistencia, comprendí que su valoración era real, aunque siempre lo he tenido como halago exagerado. Pero aquel no era todavía el momento de escribir ni contar nada.... Sin embargo nunca se me han olvidado sus palabras: "Sé lo que es tener esa sensación, y por eso también te digo que habrá un día, más tarde o más temprano, en que de repente, sentirás que eso cambia... momento que no deberás desaprovechar".

Madrid, ciudad que primero entendió como "impuesta" y luego asumió como ciudad "real", pudo haber sido nuestro último punto de encuentro. Pero no fué así y ya no hubo otra ocasión. En julio de 1992 se fué, dejando un legado que en justicia debería recuperarse.

Para combatir ese olvido, Oviedo le dedicó hace una década una calle en la ciudad, que se encuentra en el barrio de La Corredoria, y hace unos meses, su familia donó a la Biblioteca del Campus de Humanidades el archivo-legado literario, ocasión que se aprovechó para rendirle un homenaje al que lamenté no asistir por encontrarme fuera. Al menos ya existe un lugar en el que poder acceder a sus manuscritos, borradores, correcciones, etc.). Aparte, los trabajos periodísticos de Moyano se encuentran en las hemerotecas argentinas de diario Clarín, El Independiente, y, tras la venida a Europa, en el diario Liberación y en el suplemento cultural La Esfera de El Mundo.

Daniel Moyano. Video-homenaje.

Las alas del tigre (trailer). En producción. Audiovideoteca argentina.

Para quien esté interesado, se incluye la bibliografía de Moyano a continuación, entre la que se incluyen dos obras editadas de forma póstuma, "Dónde estás con tus ojos celestes", que acababa de finalizar poco antes de su fallecimiento y "En la atmósfera", novela corta o "nouvelle" que había sido escrita entre 1984 y 1987 y que acaba de ser publicada hace un par de meses en Argentina.


"Artistas de variedades". Cuentos. Daniel Moyano, Editorial Assandri, Córdoba, 1960.
"El rescate". Cuentos. Daniel Moyano, Burnichón Editor, Buenos Aires, 1963.
"La lombriz". Cuentos. Daniel Moyano, Nueve 64 Editora, Buenos Aires, 1964.
"Una luz muy lejana". Novela. Daniel Moyano, Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1966.
"El fuego interrumpido". Cuentos. Daniel Moyano, Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1967.
"El monstruo y otros cuentos". Cuentos. Daniel Moyano, Centro Editor de América Latina, Buenos Aires, 1967.
"El oscuro". Novela. Daniel Moyano, Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1968.
"Mi música es para esta gente". Relatos. Daniel Moyano, Monte Ávila Editores, Caracas, 1970.
"El estuche del cocodrilo". Cuentos. Daniel Moyano, Ediciones del Sol, Buenos Aires, 1974.
"El trino del diablo". Novela. Daniel Moyano, Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1974.
"El vuelo del tigre". Novela. Daniel Moyano, Editorial Legasa, Madrid, 1981.
"La espera y otros cuentos". Cuentos. Daniel Moyano, Centro Editor de América Latina, Buenos Aires, 1982.
"Libro de navíos y borrascas". Novela. Daniel Moyano, Editorial Legasa, Buenos Aires, 1983.
"Tres golpes de timbal". Novela. Daniel Moyano, Editorial Alfaguara, Madrid, 1989.
"Un silencio de corchea". Relatos. Daniel Moyano, Ediciones KRK, Madrid, 1999.
"Dónde estás con tus ojos celestes". Novela. Daniel Moyano, editorial Gárgola, Buenos Aires, 2005.
"En la atmósfera". Nouvelle. Daniel Moyano, El Mensú Ediciones, Villa María, Córdoba, 2012.

En España llevamos tres reformas educativas en tres décadas, y el nivel educativo ha ido descendiendo de forma preocupante. Cada vez se lee menos y se escribe peor... Ojalá hubiera un Daniel en cada colegio e instituto, en cada Universidad. Cambiar el mundo a base de cuentos, es la utopía por excelencia del genio creativo.

viernes, 8 de febrero de 2013

Stringfever, cuarteto genéticamente modificado


Eclecticismo, evolución y fusión son términos que me interesan en casi todos los ámbitos y sectores. En numerosas ocasiones suponen experimentos fallidos, pero en otras ofrecen resultados interesantes.

He encontrado uno de los casos interesantes. Se autocalifican como el primer cuarteto genéticamente modificado y lo componen cuatro británicos miembros de una misma familia (Broadbent), tres hermanos ("Big Brother" Giles, "Middle brother" Ralph y "Little brother" Neal) y uno de sus primos ("Cousin" Graham) y conforman Stringfever.


Al indudable talento y formación (no en vano Giles y Ralph salieron de las aulas de la London Royal Academy of Music) unen el sentido de espectáculo y buen humor.

La anteriormente mencionada autocalificación de cuarteto genéticamente modificado viene dada por la sustitución que realizan de los clásicos instrumentos de madera y cuerda frotada (violines, violas, chelo...) por novedosos "electrófonos violectras" de 5 y 6 cuerdas y chillones colores, que sin duda pierden la resonancia de las cajas de madera pero también ganan nuevos matices mediante efectos generados electrónicamente.


Como muestra del singular trabajo que realizan, sirvan algunos ejemplos. Se atreven a tocar el Bolero de Ravel de una forma muy particular, los cuatro a la vez sobre el mismo chelo...


como a realizar un paseo por la Historia Musical en 5 minutos...


que igual se atreven con música de cine...






viernes, 1 de febrero de 2013

Nefasta (e imposible) experiencia de compra de Windows 8. Microsoft "pasa" de sus clientes.


Esta pasada noche finalizaba una oferta bastante interesante para actualizar a Windows 8 sistemas operativos anteriores. Tenía decidido actualizar dos portátiles, uno con Windows XP y otro con Windows 7, aprovechando dicha oferta, abierta desde hace 98 días, según la cual accedías a cada licencia por 29,99 € (a lo que se sumaba la gratuidad del Pack Media Center).

Por mi parte incumplí uno de los preceptos sagrados de la oportunidad: "No dejes para última hora lo que puedas hacer antes", y es algo que lamento. Pero por otra parte, la marca, Microsoft, lo que ha hecho (tampoco me esperaba mucho más, ciertamente) ha sido evidenciar, una vez más, su soberbia y absoluta falta de sensibilidad hacia, no ya sus clientes potenciales, sino hacia los actuales.

Durante varias horas de la tarde-noche de ayer intenté infructuosamente realizar el pago de las correspondientes licencias. Algún problema técnico del servidor de Microsoft (quizá saturación) no permitió que se llevara a cabo ninguno de los innumerables intentos de compra. Las llamadas telefónicas remitían a horario de oficina a partir de las 9 de la mañana.

A las 8.30 horas llamada al banco para ver si había habido alguna incidencia con la tarjeta, con la cuenta o con la introducción de datos, no fuera a ser que, además de no haber conseguido la compra, se hubieran realizado (en diversos foros se pueden leer experiencias similares muy desagradables) cargos en la tarjeta. Afortunadamente nada.

A las 9 de la mañana, llamada a Atención al Cliente de Microsoft para dar, como no podía ser de otra manera, con una pared humana. La única respuesta que obtengo es que no tienen conocimiento de incidencia alguna y que si quiero obtener el producto debo abonar 279,99 € (más 159,99 € del pack Media Center). A cada intento por razonar, obtengo la misma respuesta una y otra vez (y no, no era un robot, era una mujer).



Me voy a la web oficial de la tienda de Microsoft, y veo que tienen un chat en directo para atender al cliente. Accedo y veo que soy la primera persona en cola, saludo y me contestan. Por las respuestas veo que la supuesta Marian N tampoco es un robot. Cuento mi experiencia y como respuesta obtengo el mismo resultado que el anterior aunque con un reconocimiento de que sus servidores estuvieron saturados y que por eso no se habría podido realizar mi compra. Sin embargo, con la sensibilidad impuesta por la politica de empresa de Microsoft, vuelvo a encontrarme con una única opción, pagar los precios actuales 340 € en lugar de los 30 € de anoche. Les recalco la poca sensibilidad y que si puedo elevar mi caso a alguna instacia de Microsoft, y como respuesta la misma: si lo quiero, a pagar 340€... Lógicamente no lo voy a hacer.

Si uno se va al Carrefour con un folleto de ofertas en la mano, a por un producto que le interesa, y aunque sea en el último minuto del último día de la oferta, uno se encuentra con que el producto no está en las estanterías, el dependiente mira en su ordenador si ese producto está agotado en toda la cadena Carrefour o si todavía tendrán stock (stock que ya vendrá con su precio actualizado, superior al de la oferta del folleto). Si el producto todavía existe para Carrefour, ofrencen la opción de tomar nota, te indican fecha aproximada de llegada y te llaman o envían mensaje para avisar de que puedes pasar a por el producto (incluso en ese momento puedes desistir, por la razón que sea, de ir a comprarlo) con el precio de la oferta, no con el actual (pues tú has ido, aunque fuera en el último minuto, en tiempo para disfrutar de la misma).

Para los señores de Microsoft, el hecho de que SUS servidores no tuvieran un correcto funcionamiento durante el periodo de oferta, pasa a ser un problema, no para ellos, sino para el CLIENTE. Curiosa forma de mimar a la clientela, de fomentar imagen de marca y atraer clientes potenciales. Como les he dicho, luego se quejan de la imagen de marca y del pirateo de sus productos.

¿Y a los usuarios qué nos queda?. El pataleo. Y como éste es MI blog, voy a patalear lo que me dé la gana. Si por alguna razón, recibo alguna noticia satisfactoria por parte de Microsoft (algo bastante improbable), obtendrán el adecuado reconocimiento. De momento se quedan sin los 60€ de las dos licencias y con el lanzamiento hacia el ciberespacio de mi ciberlamento, para que quienes en el futuro estén pensando en productos Microsoft como opción de compra, les sirva para conocer cómo tratan a su clientela.

¿Soluciones para el software de esos dos portátiles? Pocas, pero encaminadas hacia el software libre. De momento el portátil con Windows XP pasará en breve a tener Linux Ubuntu, y el Windows 7 se quedará de momento como está y dentro de un tiempo pasará también a ser otro de la tribu Ubuntu. Para la telefonía móvil que está para renovar terminales, habrá que pensarse mucho lo de los Windows Phone.

Y es que el problema de las alternativas es más bien desolador. Los detractores de Microsoft, fans de Apple, me traen igualmente al pairo. Su sistema tampoco me ha convencido (la música que te compras en iTunes luego no la puedes llevar a otra parte, la política de post-venta y reparaciones es escandalosa,...). Android es un auténtico problema de seguridad....

Nos ha tocado vivir una época en la que estamos en manos de una oligarquía empresarial formada por Bancos, Energéticas, Petroleras, Operadoras de Telecomunicaciones y Tecnológicas, sobre las que no puedes hacer más que, como las lentejas, si las quieres las tomas, y si no, las dejas. A lo sumo, puedes irte de los brazos de una a los brazos de otra, con la vana esperanza de que con el cambio dejás atrás malestares y problemas, que, al cabo de un tiempo, compruebas con desesperanza que te los vuelves a encontra, como si de un Dèja Vu se tratara. Te das el gusto de enviar a una empresa (operadora, electricidad, banco, etc.) a paseo con el autoengaño de que con la nueva te va a ir mejor, y con el tiempo te encuentras con los mismos problemas.

Pero bueno, que al menos no sea que nos quedamos sin dar el pataleo. Al menos, de forma puntual y momentánea les hace daño.

Váyanse a paseo, señores de Microsoft.